La investigación se centra en el modelo de demandas y recursos (JD-R) de Bakker y Demerouti (2013) y sus limitaciones al no considerar el papel del líder en la motivación y el proceso de deterioro de la salud. Se analiza la capacidad de los líderes para moderar las exigencias laborales, así como la influencia del burnout en la adaptabilidad y el crecimiento profesional. Se explora la importancia de las conductas de prevención y la adaptación de prácticas de liderazgo a diferentes contextos laborales.
El estudio revela la necesidad de políticas y prácticas organizacionales que consideren estos factores para mejorar el bienestar de los trabajadores y la efectividad organizacional. La investigación fue evaluada por un panel de expertos internacionales que conformaron el tribual de la tesis, siendo el presidente del tribunal D. José María Peiró Silla (Universidad de Valencia), la secretaria Dña. Patricia Rocamora Pérez (Universidad de Almería) y los vocales Dña. Chiara Consiglio (Universidad La Sapienza de Roma), Dña. Nick Bowes (Universidad Metropolitana de Cardiff) y D. Joan Boada Grau (Universidad Rovira i Virgili).
La tesis de Ana Martínez Díaz aporta nuevas perspectivas sobre la interacción entre liderazgo transformacional y comportamientos organizacionales, así como la importancia de las estrategias de prevención y adaptación para enfrentar las demandas laborales. Estos hallazgos prometen futuras investigaciones y sirven como base para la mejora de la calidad de vida en el trabajo y el rendimiento en las organizaciones.
